Crónica de un viaje de Jota

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Crónica de un viaje de Jota en la Semana Santa de este año.

Queridos amigos: Os adjunto una pequeña crónica y fotos del último viaje que hemos realizado.Para que no os olvidéis de mÃ*, os mando una foto de mi cara. Si alguien laquiere con autógrafo, que me la pida, jajajaja.

Un gran saludo a todos.
José Javier Lanzarot (Jota)
Preciosos viajes por el desierto.
ATAR EXPEDITIONS S.A.R.L.
4, Rue Serft
73000 Dakhla Marruecos


Como el viaje hasta el Ayún fue algo largo, el primer dÃ*a nos levantamos tarde y desayunamos con total tranquilidad. Al poco de comenzar la ruta, siguiendo el cauce del Saquia al Hamra, unos flamencos levantaron el vuelo al paso de la comitiva que paró a tomar el aperitivo cerca de allÃ* en un lugar tranquilo donde sólo se escuchaban los sonidos de las aves del rÃ*o. Alex demostró que era un cocinero fantástico y su sobrasada fue un éxito total. Retomando la ruta, el Gr encontró una trialera para acortar y subir a la pista de arriba y todos como locos para subir por allÃ*. HacÃ*a calor, no habÃ*a viento y el grupo decidió saltarse la ruta y que los llevaran a la playa, asÃ* que les llevé a la playa de Foun Oued y nos encontramos con la realidad del desierto: el viento. Se circulaba mal con tanta arena sin bajar algo las presiones y cuando paramos, entre el viento que se llevaba todo y el frÃ*o, nadie se quiso bañar hasta que aparecieron dos valientes que sÃ* que se mojaron un poco en un agua helada y es que las playas del desierto son heladoras, de hecho, un poco más abajo, en Cabo Blanco, hay focas todavÃ*a. Como ni tan siquiera se podÃ*a comer, nos fuimos al pueblo y buscamos un lugar en el que nos dejaran comer lo nuestro y comprarles las bebidas. Después, nos fuimos a un bonito oasis a tomar te y allÃ* nos encontramos con Jesús y Gin que habÃ*an preferido hacer la ruta y luego regresamos al hotel. Precisamente quiero dar las gracias a Jesús y Gin porque me trajeron un winch, una rueda y el bloqueo, en su coche.
Al dÃ*a siguiente, la ruta nos iba a llevar por las dunas y la cosa prometÃ*a, en la primera duna, se sube Alex y se atasca pero como era la primera, muchas risas. Comenzamos a internarnos por un auténtico mar de dunas conmigo al frente y claro, el que se atascaba era yo y varios coches se turnaron para darme el tirón milagroso y sacarme. Los atascos se sucedÃ*an pero siempre se solucionaban rápido tras la oportuna foto y las risas. Sin embargo, el que tuvo un atasco que te pasas, fue el coche de Rafa, arriba de una duna enorme que se cortaba a pico cuando ya todos habÃ*amos bajado pero con la ayuda de Jesús, que le quitó toda la arena al coche, casi tragándosela, y con el cabrestante de Nacho, al final se pudo sacar el coche con la alegrÃ*a de todos. El viento era tremendo en ese momento y se tragaba arena sólo con mirar al atascado. Como ya comenzaba a decaer la tarde, nos hicimos un cascaporro hasta la carretera y regreso al Ayún. Tras la ducha, al restaurante a comer tajine de camello.
La siguiente ruta fue costeando hacia el sur por las playas desde el Ayún y a poco de comenzar el primer atasco me lo llevé yo, claro, por ir delante, en una zona de arena muy blanda en la que no se podÃ*a poner otro coche delante porque se atascaba, fue Jaime el que me sacó a riesgo de atascarse él. Seguimos por la playa y luego por los acantilados con unas vistas del mar estrellándose contra los muros pétreos, preciosos. Pasamos por un lugar con un gran agujero en el suelo que comunicaba con el mar y allÃ* paramos un rato. Jaime en un arrebato de locura y a pesar de los gritos de Gabriela, la agarró y casi la tira por el agujero. Tras las risas, nuevamente en marcha disfrutando de los bellos paisajes. Ya por la tarde, llegamos a una playa en la que habÃ*a varios barcos varados en la playa y nos subimos a ellos pasando un buen rato hasta que casi se nos hizo de noche. La gendarmerie motorizada con quad, vino a saludarnos y a mirar las cosas tan raras que hacen los turistas, jajaja. Cuando ya salÃ*amos a la carretera, fue Mikel el que se atascó y tuvo que suplicar de rodillas que le sacaran. Mas risas y al Ayún otra vez.
Se sacaron los equipajes del hotel pues ya no Ã*bamos a volver al Ayún y nos pusimos en camino hacia Smara. HabÃ*a que seguir el cauce del Saquia al Hamra y para ello descendimos por una trialerilla. La ruta era de navegación y cuando el grupo se iba desgranando, unos aparecÃ*an por aquÃ* y otros por allá pero al final nos reagrupábamos. Casi en todo momento fue Gin la que navegó y lo hizo bastante bien pues se perdió las veces justas para pasar un buen rato, jajaja. El viento, por supuesto nos acompañó todo el rato. El paisaje era cambiante todo el rato y tan pronto se circulaba por caminos polvorientos sin nada como por el medio de zonas llenas de arbustos hasta la otra orilla del rÃ*o. El único problema que tuvieron los coches fue que al Jeep le dio una piedra en la parrilla y estropeó un poco el ventilador que iba haciendo ruido pero se lo arreglaron rápido. Antes de entrar en Sidi Ahmed Larousi, cambiamos de dirección y el camino se convirtió llanura infinita por la que se podÃ*a circular a más de cien kms./h. pero con cuidado porque de vez en cuando habÃ*a cambios de rasante que hasta que no llegabas a ellos, no los veÃ*as y alguno saltó de verdad como en el Dakar. A esta velocidad pronto se llegó a la roca del Santón y subimos a verla pero el viento era tal, que amenazaba con tirarnos desde arriba y nos bajamos para continuar hasta la carretera pues allÃ* la mitad del grupo continuaba hasta Smara para dormir en el hotel y la otra mitad nos fuimos a la Montaña de los vientos a acampar al lado de la casita española. Montamos las tiendas turnándonos el martillo y luego hicimos una cena dentro de la casita, genial y lo pasamos de maravilla pero pronto nos caÃ*amos de sueño y nos fuimos a dormir con el susurro del viento, bueno, con el ulular salvaje que parecÃ*a que nos iba a arrancar la tienda, pero yo, por lo menos, no me enteré de nada.
Por la mañana nos encontramos todos a la entrada de Smara y rumbo hasta Agadir sin problemas ni demasiada circulación. Al dÃ*a siguiente rumbo a Marrakech y por el camino tuve el único pinchazo de todo el grupo en el viaje. Al llegar a la ciudad imperial nos despedimos del grupo porque nosotros tenÃ*amos que hablar con una persona y nos habÃ*a invitado a dormir en un precioso riad en la medina. Al dÃ*a siguiente comenzamos la vuelta mientras los demás subÃ*an. HabÃ*amos hablado con nuestro amigo Jorge que subÃ*a con su coche y unas motos y quad, para vernos en Tiznit y lo hicimos tan bien, que llegamos con minutos de diferencia. Nos fuimos a cenar a un restaurante y nos recorrimos toda la ciudad andando sin encontrar ninguno y los que habÃ*a iban a cerrar a pesar de ser las nueve de la noche. Finalmente nos encontramos una pizzerÃ*a donde nos atendieron sin cerrarnos hasta tarde. Por la mañana ellos continuaron rumbo norte y nosotros nos fuimos al mar para ir de turismo bordeándolo hasta Sidi Ifni parando en playitas y lugares preciosos. Por cierto, que están construyendo montones de hoteles y complejos turÃ*sticos hasta Playa Blanca.
A la salida de Sidi Ifni, nos vieron unos amigos del foro y nos vinieron a saludar y conocer, ya que personalmente no nos conocÃ*amos. Nos fuimos los cuatro coches a Boujerif viendo como la antigua pista está ahora asfaltada. Cogimos el camino para ir hacia el hotel y al poco encontramos una trialera que no es que fuera difÃ*cil, pero de noche ya se sabe que todos los gatos son pardos. En el hotel nos fuimos a dormir todos a una hayma y en ella nos hicimos la cena. La sobrasada que nos dio Alex, tuvo un éxito tremendo igual que el vodka con caramelo, que entre Jorge y yo casi nos lo bebimos todo. Al dÃ*a siguiente ellos continuaron su ruta y nosotros seguimos caminos hacia el Ayún, pero antes de llegar a Guelmine, paramos en Lakhsi, un pueblecillo de barro de donde procede la familia de Hanna y paramos a tomar un te con algunos de sus habitantes. Por la noche llegamos al Ayún y al dÃ*a siguiente le ponÃ*an el bloqueo al coche. A la siguiente mañana bajamos hacia Dakhla parando en una pequeña playita en el kraa, donde nos quedamos dos dÃ*as comiendo de lo que recogÃ*amos, lapas enormes, mejillones y cangrejos enormes que algún que otro pescador nos vendÃ*a por dos euros. El domingo por fin llegamos a Dakhla tras dos semanitas fuera.

Ahora las fotos

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[lanzarotoy]

Espectacular!!!! Mesjor más fotos!!! :twisted:

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